Sábado, muy sábado...

En días como hoy, donde acabo de terminar con una semana intensa con todas las letras. Un sábado madrugando a las 6  en busca de aprobar, digo aprender, mate básica (por segunda vez, valga decir). La semana más cansada de mi vida, probablemente. Dormí menos de 30 horas en  toda la semana y no hubo minuto en que no me haya sentido cansada. Esto es , de repente, lo que tienen los años para mi. Ya no tengo 14, son 17. A mi me queda claro que cuando más te cuesta algo, más lo valoras cuando llega. Hoy esperé con ansias el sábado a la tarde y seguro este a sido el sábado más lindo. Sin nada planeado. Solo mi cama caliente, una  linda peli ambientada en New York y listo. Estoy de vuelta, soy la Nidya del cole, la que los sábados veía cuatro o hasta cinco comedias románticas y sentía que el mundo paraba para que ella sea feliz... 

Sí, todo bien hasta que mi tarde de ocio se va acercando un poco más al mundo 2.0 y con esto quiero decirles que me dedique a stalkear a medio País  y a reírme de las fotos de nuestra época estúpida (12,13,14,15 años) No siempre el pasado fue mejor. Veo un par de fotos, vuelvo a mi comedia romántica y me acuerdo que tengo un par de amigos románticos, pero romaaaaaaaaaaaaaaaanticos! de esos que les escriben un wall diario a sus novias ("te amo gorrrrrrda""me hace muy feliz tenerte a mi lado. Contigo hasta el fin del mundo") Voy a sus perfiles en busca del lado romanticón de mi lista de amigos y me encuentro con 50 fotos, 0 walls y con un amigo soltero. Obviamente no conozco las razones del fin de ese romance, que a decir por las publicaciones y  las 1500 fotos en un solo verano parecía ser el romance eterno. El único amigo que pensé  nos iba a invitar a su casamiento. No,resulta que el amigo no se casa, las publicaciones no eran 100% reales y las 1500 fotos de abrazos y besos se convirtieron en 50 fotos de motos, carros y tablas de surf. Es que si hay algo que me jode mucho de los normales es que les encanta hacer las cosas sin pensar, actúan por bronca y no dejan que el dolor pase. Nunca piensan en lo lindo en el momento feo. No sé que pasará el día que me pase algo similar pero lo único que si sé, es que un momento feliz basta para recordar con amor algo que terminó. Y no, yo no sacaría las fotos.

Hoy ése hecho me alegro la vida, saber que ser anormal puede resultar -a veces- muy, muy paja.

Que anden bien y ojala  se estén enfiestando mucho...

No quiero, gracias.

Soy de las soñadoras, de las que vive con lo rosa de la vida, de las que cantan "firework" fueeeeeerte y creen que nada es imposible (lo del codo es complicado, pero se puede) Soy así, pienso que no todo es malas intenciones, que la gente se ayuda en el camino y es feliz con la felicidad del otro. Creo en la buenitud, en el trabajo por amor y no por dinero. Creo en que todavía hay gente con pasiones...

Terminé el colegio y decidí seguir con el mundo normal. Estudiar, esperar a terminar pronto y si todo sale como tiene que salir trabajar. Sabía que en el camino iba a encontrar gente distinta. La gente grande me decía que las cosas no eran como yo pensaba. Todos me daban la contra. "No es como tu dices, no toda la gente es buena" Y no estaba convencida de eso, hasta hace una semana, que volví a empezar clases y me dí un golpe con la realidad. Con eso que no quería ver, porque no me hacía la idea que yo estaba en ese camino. Porque todos entramos a este circo de mierda (con todo respeto para los que les gusta) al que llamamos vida exitosa. Estudiamos, trabajamos, juntamos muuuuuucho dinero sin importar arruinar a otras personas, nos compramos un BMW y hacemos ochenta maestrías y doctorados. Nos sentimos mejor que el resto. Nos hacemos gerentes, le hacemos la vida imposible al que se pelea el puesto con nosotros. Nos compramos un nuevo BMW. No tenemos hijos porque no tenemos tiempo. Seguimos trabajando. Seguimos haciendo maestrías. Nos convertimos en gente arrogante en traje. Nos vemos al espejo y no reconocemos a ese niño que cuando tenía cinco quería ser doctor 'para ayudar a la gente necesitada' Ah no, pero donamos 100 $ al año para los niños con cáncer y si nos reconocemos. Volvemos a ser buenos. Queremos comprar acciones en la bolsa, queremos tener más plata, queremos más casas, queremos más todo. Esa es la vida, te conviertes en el ser mas arrogante del mundo pero tú eres gerente, tienes un BMW y eres el mejor administrador del país. Eres Feliz.

Ahora entiendo porque hay gente que no va a la universidad, que no quiere ir a una oficina. Gente que se dedica a hacer lo que le apasiona, gente que pinta lindo y no tiene un BMW pero sus cuadros le llenan el alma. Ahora entiendo a los que se dan un año sabático por Europa y le dicen 'paso' al mundo universitario. Entiendo que todos ustedes a los que yo antes llamaba 'flojos' son en realidad idealistas y no soportan la realidad que nos tocó vivir. Gente que cree que haciendo lo que le apasiona por pasión va a ser feliz...Gente que no quiere entrar al circo.Yo ya estoy dentro,ya estoy aquí, pero realmente si me hubieran avisado que las cosas eran así, no hubiera entrado. Tengo miedo, porque cada que me choco con la realidad me enojo, me arrepiento, me muero de bronca. Me gusta lo que hago, me gusta lo que estudio. Quiero trabajar como chino, que me den muchísimas cosas para hacer y no poder dormir del stress. Pero les regalo las ochenta maestrías, las peleas por el mejor puesto, el BMW y todas esas cosas que para mí no van de la mano con pasión y éxito. No gracias, no quiero.

Igual sigo siendo tonta, y todavía tengo la esperanza que hay alguno por ahí que piensa igual que yo...  

La verdad es que lo último que diría en mi vida es "no tengo hijos, porque no tengo tiempo" Porque a mí, mi mami me enseñó que la familia esta antes que un BMW...

Me voy a donde me lleve la vida...

Probablemente sea una completa estupidez. Pero en algún momento de mi vida, algún día, quiero jugármela. Viajar sin mucho dinero, sin mucho equipaje, sin mucha planificación. Salir con fecha de ida pero sin fecha de vuelta, algo así como "me voy a donde me lleve la vida..."

Necesito juntar la fuerza para hacerlo, necesito encontrar mi espíritu aventurero. Olvidarme de la planchita, de las cremas, de los productos para el pelo, de los zapatos altos y de los vestidos. Armar una mochila simple y tener un viaje inolvidable, todavía no me animo pero en eso estamos....