Esperanza
viene de esperar, de creer, de querer. Hace unas semanas tuitié y recibí una
respuesta que me hizo pensar 'Lo último que se pierde es la esperanza, no la
pierdas'
Si viene de esperar no es lo mío porque soy
impaciente y puntual. Odio esperar. Si viene de desear, buenísimo deseo muchas
cosas, quiero ser más alta, más flaca, tener el pelo liso, quiero tomar el té
con Katy Perry. Bueno deseemos entonces, soy buena soñando si no pregúntense
porque sigo esperando que Peter Lanzani me venga a buscar para ir a la fiesta
de graduación. 'No pierdas las esperanzas' 'Confía' 'Ten Fe', es fácil decirlo,
es fácil cuando no te toca ser la desesperanzada. Pero seamos un toque
realistas, No es fácil confiar en lo inconfiable, No es fácil mantener la
esperanza en los momentos de desesperanza. Porque cuando te toca estar en los
zapatos del desesperanzado se complica el tema, te cambia el panorama, se te
empaña la ventana, te nubla la niebla y dentro de toda esa oscuridad solo te
queda una palabra repetida por todo el mundo, ESPERANZA, un todo se va a
arreglar, un lo importante es que estas bien, un todo va a mejorar, un Dios
ahorca pero no aprieta. Pierdes la fe, las esperanzas, pierdes la pelea. Caes
rendido mismo boxeador en último round, le pierdes la pelea a la vida, no a
cualquiera, a la vida. Pero lo que tu no sabes es que la vida es una constante
guerra mundial, donde un día te toca ser el triunfador y otro te toca ser el
golpeado. Pero sabes cómo se gana? Cuando nunca pierdes la esperanza, cuando
cada caída se convierte en una esperanza de levantarte con más fuerza y con una
nueva técnica para caer. Porque la vida es así, con el tiempo aprendes a
caerte, encuentras tus puntos débiles y tus puntos menos débiles. Hay un
momento en el camino donde tienes que reconocer, aunque te cueste, que la vida
está hecha de idas y vueltas, de alegrías y penas, de fracasos y éxitos y con
el tiempo aprendes a vivir con ellos, a reírte de lo bueno y de lo malo y sobre
todo a nunca perder la esperanza.
Porque la esperanza
no viene de esperar, viene de convicción, de certeza, de soñar. Tener esperanza
es saber que después del rojo del semáforo llega el verde, saber que después
del invierno llega la primavera, saber que luego de la noche llega el día. Tener esperanza no es soñar lo
imposible, es soñar y por el simple hecho de soñar creerlo posible. Lo último que se pierde es la esperanza, porque es precisamente la
esperanza el motor de nuestra vida. Yo estudio porque estoy convencida que en
algún momento voy a recibirme y voy a decirle al mundo Hola mis amigos me llamo Nidya y sobreviví la secundaria y la facultad,
cómanse esa!! Sé que no voy a tomar el té con
Katy Perry y que Peter no me va a venir a buscar, y claro está que yo no sé
inglés así que con Katy vamos a tener cero comunicación y Peter tiene novia y
yo de pirata ni un pelo porque con todo este asuntito del Karma le tengo miedo.
El resto, es solo cuestión de esperanza. De soñar y creer en que eso que sueño,
algún día se va a hacer realidad. Yo siempre quise ser una chica inteligente, tener
notas altas y dejar de ser la tontita. Siempre quise cantar las canciones en
inglés que cantaba mi hermana cuando yo tenía ocho. Hoy soy parte del tercio
superior de mi clase y sé más de cincuenta canciones en inglés. Voy a empezar a
soñar en grande porque si pude con esto, puedo con todo y aunque aun tenga que
pasar 2 horas con la planchita y quemarme seis dedos para conseguir el pelo
soñado tengo la esperanza de que algún día algún sabio creará algo definitivo
no invasivo para nosotras las que nacimos con el pelo afro.
Cuando empecé
en el blog les dije a todos: me van a leer dos, voy a ser una fracasada, soy
una loser. Cuando Salí a exponer hoy les dije a todos: voy a reírme, me va a
salir todo mal, no sé nada. Hace unos años le decía a mi amiga: Cuando entre en
un talle 14 me voy a sentir Dios. Chicos, no hay imposibles. El blog ya tiene
1700 visitas, tuve 40 minutos de exposición y ahora mismo estoy dentro de un
talle 14. Yo no sé ustedes, pero a mí me queda claro que todo se me puede ir
perdiendo con el tiempo, las gomitas del pelo, las crazy bands, los amigos, el
pelo, los celus. Pero hay algo que no voy a perder nunca por más imposible que
parezca, la esperanza. Porque yo soy de las esperanzadas y así me está yendo re
bien.
Por eso me caes tan bien y me gusta tanto tu blog.
ResponderEliminarMe haces querer ser una mejor persona cada vez que leo tus entradas!
Yo tengo mucha paciencia, esperanza no tanto.
Pero las dos están medianamente relacionadas.
A veces también pasa por tener fe.
Que andes bien